Los comerciantes de cereales europeos siguen ajustando su previsión de producción de grano para este año en la Unión Europea. En la realizada este mes de junio han revisado al alza la que manejaban para España, que sitúan ahora en 23,4 millones de toneladas (frente a los 19,2 millones de toneladas que estimaron el pasado mes de marzo). Esa cifra supone un aumento también con respecto a la obtenida el año pasado del 10,6%.

Todos los tipos de grano contribuyen al incremento tanto respecto a la cifra de marzo como si se compara con la cosecha recogida en 2024. En el caso de la cebada, el Comité del Comercio de Cereales y Oleaginosas de la UE (COCERAL) estima que se superarán los 9 millones de toneladas mientras que de trigo blando se obtendrán más de 7 millones y la producción de trigo duro rozará las 900.000 toneladas. Para el maíz prevé un volumen algo superior al del año pasado, de 3,7 millones de toneladas. Considerando todos los cereales, el incremento se debe a una mejora de los rendimientos, ya que la superficie se habría mantenido estable.

A nivel comunitario, COCERAL espera una cosecha de 279,2 millones de toneladas, superior a la prevista en marzo (274,4 millones) y también más alta que la obtenida en 2024 en un 7,7%. Entre los principales países productores de cereales de la UE, los comerciantes esperan un aumento de la producción en Francia (61 millones de toneladas, frente a 53,5 millones en 2024) y en Rumanía (22,8 millones de toneladas frente a 20,6 millones el año pasado) y resultados más estables en Alemania (40,8 millones de toneladas) y Polonia (34 millones).

Los comerciantes presentan también previsiones para algunos países terceros, entre ellos Ucrania. Este país podría llegar este año a 57,5 millones de toneladas, frente a 54 millones en 2024.